Una enorme sorpresa se dio la señora María Guadalupe Pérez Hernández cuando descubrió el regalo que sus dos hijas le tenían preparado por su cumpleaños número 60.
Elizabeth Cruz Pérez, una de sus hijas, platica que desde que tienen memoria su mamá siempre les había dicho que quería viajar a Tierra Santa.
La oportunidad se dio en 2018, cuando la señora María Guadalupe cumplió 60 años, para ese entonces sus hijas ya tenían tiempo ahorrando para hacerle una comida familiar, pero después de hacer memoria, decidieron darle como regalo el viaje de sus sueños.
“Nos dimos a la tarea de investigar y los viajes a ese lugar no son tan baratos por lo que solo teníamos la posibilidad de cubrir un pasaje. Viendo agencias de viaje, buscamos una que fuera segura y después de mucho buscar, encontramos a Centro de Peregrinaciones”, relata Elizabeth.
Su principal inquietud era que su mamá iba a ir sola y que ella nunca se había subido a un avión. Agendamos una cita y preguntamos todas nuestras dudas, nos aseguraron que ella estaría bien cuidada y que tendrían un guía que hablaba español y estaría siempre al pendiente.
“Mi mamá es una persona de la tercera edad y por lo mismo, no tiene mucho manejo de la tecnología, la guía nos mandaba fotos del grupo y nos escribía para decirnos que todo estaba bien, eso nos dio mucha tranquilidad, saber que ella estaba bien cuidada a pesar que nosotros estuviéramos lejos”, agregó.
La experiencia
Por su parte, María Guadalupe, indica que el principal motivo para hacer un Tour a Tierra Santa, era su fe en Dios y aunque en un principio sentía que era imposible, agradece a Dios por iluminar la mente de sus hijas y darle ese regalo.
“Ellas me avisaron antes porque tenía que pedirle permiso a mi párroco para faltar a un evento, si no, hubiera sido un regalo sorpresa. Gracias a Dios tuve esa experiencia muy bonita”, indica.
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En relación a nunca haber viajado en avión, platica que oró mucho para que los nervios no le ganaran y que todo saliera bien, el servicio del guía fue muy bueno ya que los acompañó en todo momento.
Su lugar favorito fue donde fue anunciada la Virgen María, ahí sintió una brisa que los bendecía. “Todo me encantó mucho, el Muro de los Lamentos y también en donde fue crucificado nuestro Señor Jesucristo. Les recomiendo a las personas que vayan, es una experiencia maravillosa”, finalizó.